Enmedio de las tragedias de la semana con la rebelión en Libia, el huracán Irene, el “terremoto” de USA y el hecho que todavía no nos ganamos el Super Bingo de El Diario de Hoy buscamos refugio y abrigo emocional estomacal allá en nuestra propia sucursal del Cielo y capital del mundo… es así que aprovechamos que medio bajó la gasolina y nos apuntamos en nuestro primer viaje culinario a Santa Ana a hacerle guerra cantada a nuestro nuevo lugar estandarte para la gula, “Torta Loca, La Antorcha“,
Ya desde hace años Santa Ana es uno de nuestros destinos favoritos para visitar, comer y partuzar… varias son las Fiestas Julias (más que todo Ferias Ganaderas) en las que nos hemos hecho presentes a colaborar en el consumo per cápita de nuestras bebidas malteadas o bien asistido a los graderíos del Estadio Oscar Quiteño a presenciar los tigrillos del gran FAS (con panes chucos y boca de mango verde en mano) o hasta bajonear ahí por el Parque Central con unos bien recetados chéveres… ufff, ufff y recontra ufff! 😉

(suspiros) Santa Ana...
Sin embargo a la fecha siempre nos quedábamos cortos con explorar uno de los lugares insignia de esta ciudad y del que en demasiadas tertulias habíamos escuchado *titánicas* historias y *colosales* anécdotas: “Torta Loca, La Antorcha“… fue ya con esta directiva que finalmente nos atrevimos a caer al lugar de los hechos y poco a poco ir desvelando sus sorpresas gastrónomicas à la mexicana.
Comenzamos con algo “light” (para el calibre que acá se manejan) y para ellos hacemos cita con la orden de Super Tacos,
El plato viene con 4 tacos con carne de res, tomate y cilantro (chirmol), lechuga y un chorrito de mayonesa (que ya en otras ocasiones hemos discutido es más sazón tex-mex pero bueh…)
De ribete nos sirven una pequeña guarnición de frijolitos borrachos que le hacen barra a los demás ingredientes para confeccionarnos cada bocado todavía mejor,
El sabor de los tacos es válido… en la parte donde se nos queda corta es en la confección de la tortilla ya que no es la clásica de taco… no es doble ni refrita y falla en cumplir el cometido de que aguante el baño que el juguito de la carne y las salsas desprenden… ultimadamente es inevitable que la tortilla se nos autodestruya y nos quedemos pellizcando el plato agarrando los puchitos del plato… fuera de eso, sebaaastian…
Como plugin a este trato nos sirvieron un picadito de cebollita curtida picantito y con el sabor avinagrado que todos amamos y conocemos, full recomendado,
El siguiente platillo a degustar fue uno que nos acercó un cacho más a la pièce de résistance de la velada… mientras tanto nos decidimos probar la sección de “Tortitas” que “Torta Loca, La Antorcha” nos presenta y en este rubro la escogida fue la Manoseadita,
Al ver tamaño ya vamos deduciendo que “Torta Loca, La Antorcha” tiene problemas con sus diminutivos… su apariencia es inocente, normal (dentro de lo que cabe) y correcta… para reforzar la perspectiva acá mostramos un comparativo para darles idea de su proporción,
Esta especialidad en particular se maneja una buena dosis de carne de res, frijoles fritos, aguacate, cebollita caramelizada y quesillo.
Ahora bien, el verdadero upgrade de esta torta es al atravernos condimentarla con la propia salsa picante de “Torta Loca, La Antorcha“: El Chile Silbando al Revés,
La consistencia es cremosita y de no ser precavidos con él fácil nos aseguramos recordarnos de estas comidas más tarde… sin embargo al mismo tiempo es el culpable de permitirnos consentirnos con placeres como este que hacen que todo valga la pena :),
Todo lo anterior sólo nos sirvió para calentar motores y hacerle ganas al verdadero motivo por el que remamos desde Sívar a Santa Ana… muchos han sido los rumores y cuentos que habíamos escuchado de las míticas tortas “locas” que “Torta Loca, La Antorcha” se maneja, fue ya casi decidiéndonos a pedirla que en medio de nuestro festín escuchamos a lo lejos y desde la calle el clásico grito de “EL PAN!!!”… asomándonos a la ventana pudimos ver el presagio de lo que en unos minutos nos esperaba,
No es tan seguido que un tortón lo transportan en una caja cuasi-industrial de estiba y ni siquiera termina de caber… ya sabiendo más o menos a lo que nos estábamos metiendo fue que perdimos el miedo y dimos en paso en falso ordenando la Torta Friguey,
Está demás hablar del tamaño descomunal de esta vaina… cada porción (1/4) podría ser una torta, suficiente para dejarnos “satisfechos”… ya dos pedazos es un comida completa en su propio mérito… el tercer pedazo es gula… y el cuarto se vuelve una sentencia y pase directo al 3er Círculo del Infierno de Dante.
Centrándonos en los ingredientes tenemos una buena selección: Carne de cerdo (la única del menú), aguacate, chirmol, cebolla, frijoles borrachos, mayonesa, queso derretido y la adición cítrica de varias cuñitas de piña.
Haciéndole ganas desarmamos la primera porción y ya una vez la teníamos setteada con la cebollita y el chilito correspondiente era dificil decirle que no a esta vista,
PROTIP: Las servilletas vienen DEBAJO de la torta (entre el papel empaque y plato) – esto es clave a la hora de querer hacer malabares con las porciones y limpiarnos el menjurge de la boca/manos – es también recomendable ir adelantando y pedir una cucharita para poder sopear el rebalse de componentes en abundancia se desparraman en el plato.
Era desde Octubre del año pasado que no nos encontrábamos en una situación como esta… pegando los últimos suspiros para limpiar el plato, rozando el punto en el que el equilibrio comienza a fallar y nos pones livianos de cabeza… el mejor consejo al lidiar con este trato es que si lo almuerza, no cene y si lo cena, no duerma… tras una dedicada hora (53 minutos para ser exactos) fue necesario levantarse de la mesa y pasear por el local de restaurante antes de estar en condiciones de caminar derecho… aparentemente la Fisiopatología define todo esto como un “secuestro sanguíneo” y francamente no podemos pensar en mejores palabras para resumir la experiencia.

OUT!
Tras esta inmolación gastrointestinal es sólo natural que busquemos bajar estas viandas con un buen refresco que haga las veces de digestivo y enbuenahora tenemos a nuestra disposición los Licuados de Temporada,
Acá el sabor elegido fue de Fresa y demostró ser una excelente experiencia – de entrada es servido en un mini florero que es suficientemente galán como para quitarle la sed al más seco, además la palabra “licuado” deja de vender el tema de que esto viene siendo un espumoso, full cremosito y con los trocitos y semillitas de la fruta que chupada tras chupada (sin albur) le damos a la pajilla.
La otra mejor alternativa que tenemos es tratarnos con la siempre confiable edición limitada que Tropical nos ofrece a través de la buena Crema Soda,
Previo a esta salida no habíamos tenido la oportunidad de probarla (aunque en el tiempo que estuvimos fácil levantaron 12 latas de una mesa de 4 personas que recién se iba retirando) y realmente… aguanta… es suave, aunque el carbonatado le resta delicadeza, pero pues… es soda :S
Con respecto al ambiente, “Torta Loca, La Antorcha” es bastante tranquilo, sencillo y familiar, el core son grupos de amigos y parientes que llegan a platicar y compartir las tortuelas así como galones litros de Coca-Cola,
En el mismo decor apreciamos objetos del antaño y recuerdo, posters, tecomates y hasta tortas infables que enriquecen con naturalidad y campechanía el place.
En las paredes abundan los múltiples reportajes de los que “Torta Loca, La Antorcha” ha sido objeto o bien de los concursos y retos de los que ha servido como sede con el pasar de los años.
Otra sección del lugar tiene cualquier cantidad de fotografías ya sea de los que hemos sido visitantes y comensales junto con los propietarios que con su buena atención y evidente cortesía han sabido atender a la audiencia y ganarse en lugar en nuestros estómagos y muelas.
Hasta medios de prensa y televisión se han dado la vuelta para cubrir y hacer la reseña y hazañas de varios tragaldabas como nosotros en “Torta Loca, La Antorcha“,
De hecho la gente hasta se ha puesto “imaginativa” con la edición de los videos… “TORTA LOCAAAAAAAAAAA… TEST YOUR MIGHT… TEST YOUR MIGHT”,
A manera de resumen, es dificil haber escogido un mejor debut santaneco para visitar y darle rienda suelta a nuestro apetito, entre la tradición, la popularidad y el tamaño de los tratos en “Torta Loca, La Antorcha” es suficiente excusa para darse la vuelta y probar cualquiera de las 15 tortones que se maneja o bien cualquiera de los demás platos que tiene (incluyendo y no limitado a Panes con Galllina, Pepitos, Nachos, etc)… ampliamente recomendado! (de preferencia para cenas… durante lunch hay un tema con las moscas que es posible evitar ya cuando la temperatura ha bajado y nos ahorramos esa “espantada”).
Hasta aquí la crónica de hoy, acá les pasamos los dato$ generale$, coordenadas y fallo culinario de la semana!
Ficha Técnica | |
Nombre: | Torta Loca, La Antorcha |
Tipo de comida: | Mexicana y otros. |
Fecha de la visita: | 20-Agosto-2011 |
Dirección: | 4ª Avenida Sur; entre 27 y 29 Calle Poniente. Santa Ana. |
Teléfono: | 2440-0042 |
WWW: | Facebook | Foursquare | Mail |
Horario: | Martes – Viernes: 11:30AM – 2PM y 5PM – 9PM
Sábado y Domingo: 12PM – 9PM |
Parqueo: | Calle parking |
Precios (estimado x persona): | $10 (a lo "Loco") y $5 (a lo aburrido) |
EL highlight: | Cualquiera de los tortones… y el licuado! |
Calificación:

8/10