Huyendo de las malas noticias de esta semana decidimos escapar de nuestra depresión e indulgir nuestro síndrome de ingesta compulsiva ahogando nuestras penas en salsa de soya, aceite de chile y tofu, es así como terminamos mueleando en “Uncle Yang – Bocadillos Taiwanés“,
El lugar fue censado por nuestro paladar allá por el 2005. La invitación fue sencilla “Vamos a comer un bocadillo taiwanés”… nos quedamos con curiosidad, porque en nuestra ignorancia creíamos que la isla de Formosa era una apéndice más de China, ergo…seguía siendo comida china :S
Para nuestra impresión y deleite “Uncle Yang – Bocadillos Taiwanés” brindaba algo más que cerdito agridulce y res con semilla de marañón. Como su nombre lo dicen, “Uncle Yang – Bocadillos Taiwanés” cuenta con un amplio portafolio de pecadillos y bocadillos que caen liviano al estómago…pero si estos atacan su apeto en manada puede obligarlo a pedir “tai” y su comida para llevar… 😉
Entremos en materia con el core del lugar: Los bocadillos y siendo el primero de todos presentamos Las Empanadas Chinas (aka Los Dumplings), ufff… maná a base de arroz que pueden ser servidos fritos o al vapor (PROTIP: ¡Pedirlos fritos y a base de cerdo!). Estas “empanaditas” son excelentes aperitivos para picar los jugos gástricos. Acompañados con sus 2 salsas: agridulce y a base de soya, son el perfecto yin yang culinario.
Por otro lado tenemos el Pastel de Arroz siendo otro fichaje estrella, su textura nos recuerda a la de un tamal. La masa no tiene mucho sabor sola, por eso es necesario mezclar bien la salsa de soya y el cerdo para que se absorban bien los sabores. Una vez hecha la mezcla: Disfrute dicho pastel, sentirá como esa masa se deshace en su boca y percibirá mejor los sabores.
Continuando con el desfile, El Tamal de Cerdo a primera vista evoca la imagen de un nacatamal. Al diseccionar y separar la hoja en que viene envuelta logra uno comprobar que es un mazo de almidón. A medida que el comensal empieza a bajarle las capas de arroz aglutinado se dará cuenta que hay trocitos de camarones y otros complementos hasta llegar al delicioso relleno: Trozos de cerdo. Dicho plato puede ser acompañado a su gusto por una salsa agridulce de la casa… aunque personalmente creemos que es ketchup taiwanesa 😉
En el espíritu de los bocadillos taiwaneses, el siguiente lugar le corresponde a los Crispy Buns (aka Pastelitos Fritos) son uno de los antojitos que recomendamos ampliamente para cualquier trío de comensales. Los Crispy Buns son bollitos fritos de arroz y rellenos con una bolita de carne de cerdo condimentada con especias y previamente cocinada al vapor; ellos por sí solos son un trato sabroso y “light” (puessss, sí son frituras pero nos referimos a que no son pesados en el estómago ;)), ya cuando en adición los aliñamos con salsa de soya y chilito, ufff… se vuelven Crispy Buns Super Sayayín 4.
Otro de los platillos revelación fueron los Menudos de Cerdo en Tofu Seco que vienen siendo cortes de los cachetes y orejas del cerdo hervidos (saben mucho mejor de lo que suenan o que cualquier imagen mental de rastro municipal en la que pueden estar pensando), acompañados con tofu, abundantes hongos chinos, cebollín verde y todo esto bañado en una salsita con saborcito de ajonjolí al fondo 😛
Finalmente tenemos a nuestro aperitivo favorito, la entrada que no nos falta sobre la mesa, el Starsky de nuestro Hutch, el Pencho de nuestra Aida: El Spicy Wantan.
El clásico wantan que todos hemos conocido y probado es uno de los tentempiés por excelencia cuando almorzamos o cenamos comida oriental en comuna, “Uncle Yang – Bocadillos Taiwanés” lleva este plato un nivel más allá presentándonos el trato en su forma frita como es normalmente común o bien hervido, esto nos permite degustar una textura diferente (casi de pasta) a esa telita a la que desde hace tiempo estamos acostumbrados. Adicionalmente el plato es acompañado de retoños de soya o una orden de repollo con zanahoria curtidos en vinagre de arroz (lo que nos podemos imaginar es una buena aproximación al kimchi), todo esto sumado a la salsa de soya y agridulce lo vuelve excepcional en el menú.
En materia de platos fuertes, la selección del Arroz Pegadizo con Salsa de Ajonjolí fue épica. El plato tiene la misma textura de la coraza del tamal, pero el sabor en el arroz es más pronunciado por la salsa de ajonjolí. El arroz presenta una combinación de carne, camaroncillos y otros plug-ins donde el sabor dominante es el sésamo. A pesar que es un plato fuerte, es perfecto para una cena ligera, ya que seguramente lo dejará “set”.
Otro de estos platos que hemos tenido la oportunidad de degustar es el Tallarín con Carne de Cerdo y Verduras, un picadillo de carne de cerdo con cebollín verde, abundante sofrito de hongos y hojas de lechuga al vapor sobre una considerable porción de tallarines con el que nuestro modus operandi siempre ha sido de revolver todo el plato para mixear los ingredientes antes de comenzar la proverbial repartición, el trato no es para nada escaso y el calibre del tallarín puede poner quieto a cualquiera que intente engullir todo esto a la carrera.
“Uncle Yang – Bocadillos Taiwanés” así como la mayoría de sus homólogos tambien ofrece servicio para llevar, el cual ya en algunas ocasiones nos ha sacado de apuros en esas reuniones-almuerzos de oficina, ordenar un par de platos taiwaneses como el Arroz con Carne Molida de Cerdo en Salsa de Soya (y huevo también en soya ;)) con una orden de Spicy Wantan nos logra sacar de la rutina de la siempre-confiable pizza a domicilio o de cualquier otro combazo de comida rápida por que nos pudiéramos decidir a última hora.
Si bien “Uncle Yang – Bocadillos Taiwanés” ha sido una de nuestras canchas favoritas de varios años a la fecha, la carta de platos es lo suficientemente amplia para prestarse a varias visitas y no repetir platos, probar nuevas cosas y descubrir nuevos sabores; fue así como en esta última visita decidimos probar los postres que nos ofrecen: el Flan de Tofu con Frutas y Flan de Tofu con Maní…

ANTES...
La experiencia fue… memorable… así de la misma forma que el desastre del Hindenburg, el 11 de Septiembre y King Flyp se consideran experiencias “memorables”… (suspiros) ah, la humanidad… el horror.. :'(
El primero (Flan de Tofu con Frutas) viene siendo una cama de tofu bañada en almíbar y melocotones, cerezas, uvas… aka Una latita de Del Monte sobre tofu… lo rescatable fueron las frutas… el segundo (Flan de Tofu con Maní) es un poco más elaborado (pero menos rescatable), es la misma cama de tofu bañado en agua azucarada con maní aguado y cubierto con tubitos de hielo… HIELO… WTF??
Pocas veces en nuestra vida hemos masticado algo y tener la sensación de no saber qué estamos comiendo… es como que a pesar de saber cómo está armado el plato hubiera una desconexión con el resto de nuestros sentidos :S

... DESPUÉS
Habiendo hecho nuestra metodológica investigación de campo (Google), nos da la impresión que estos postres vienen siendo la implementación en tierras guanacas del Douhua, un postre chino que dependiendo de la provincia asiática donde estemos es todavía más folklórico de lo que hemos descrito acá (incluyendo, pero no limitado a: tapioca, soya, jengibre y hasta frijoles) por ende es muy posible que simplemente nuestro paladar si bien temerario no tuvo la fineza para saberlo apreciar.
OFF-TOPIC: Nuestra política del blog (a la fecha) siempre había sido mostrar los platos que conociéramos y que normalmente disfrutamos (bajo el entendido de que a nosotros mismos no nos gusta leer quejas, molestias, #^%&$!@!, etc.) en este caso sentimos la obligación de hacer la excepción ya que si bien metemos la manos en el fuego por las demás cosas en el menú, acá el toque dulce (a nuestro parecer) nos quedó debiendo y malamente no hay más selección que estos DOS veintiúnicos postres… si una manzana deshizo el Paraíso, estos flanes (nuestros “Aquellos-que-no-deben-ser-nombrados”) deshicieron nuestra Comarca 🙁
Ya cerrando, uno de los atractivos principales al comer comida china y que siempre disfrutamos es aquella inevitable pregunta que ya después de sentados y acomodados siempre sale a la mesa: “¿Que pedimos?” y es porque ir a uno de estos restaurantes se presta a eso, a compartir. La gran mayoría de los tratos de restaurantes son copiosos y resulta natural rolar las bandejas de comida, ver quien se aliviana con el último pedazo de cerdo agridulce que ha sobrado y en general, departir en confianza de amigos y familia. “Uncle Yang – Bocadillos Taiwanés” nos ofrece esta misma atmósfera, con una carta de platos, bocatas y condimentos tan variados y diferentes como los de la cocina cantonesa que normalmente encontramos en otros lugares, en resumen: Full recomendado*! 😉
* = Restricciones aplican para los postres.
Cerrando la jornada, acá pasamos los datos generales, coordenadas y como siempre la opinión que nos merece!
Ficha Técnica | |
Nombre: | Uncle Yang – Bocadillos Taiwanés |
Tipo de comida: | Comida Taiwanesa. |
Fecha de la visita: | 21-Septiembre-2010 |
Dirección: | En el Centro Comercial Orión, sobre el Paseo Gral Escalón y 79 Av Norte. |
Teléfono: | 2264-7118 |
WWW: | Facebook | Foursquare |
Horario: | Lunes – Domingo (11AM – 10PM). |
Parqueo: | Parqueo interno (en el Centro Comercial). |
Precios (estimado x persona): | $5 a $8 |
EL highlight: | Spicy Wantan, Tamal de Cerdo, Crispy Buns… en resumen: Bocadillos! 😉 |
Calificación:

7/10